Sutil

Temprano por la mañana:
Sonó el celular con su ring despertador de Puerto Madero, lo apague y me dormí como siempre 10 minutos más. Tomé jugo, tomé café, mande un beso volado a mi y salí corriendo con los pelos locos al viento para coger mi 10E. Me senté al lado de la ventana, giré mi cabeza para el lado derecho y me quede mirando el mar mientras pasaba por Miraflores. Bajé y seguí corriendo, iba con la cabeza hacia arriba (mis viejas manías están de vuelta) y un pequeño de 5 años sin brevete ni SOAT me atropelló con su coche dual.
  • El niño soltó una carcajada del alma debido a mi grandísimo asombro y bobes... Y yo cerré mi mañana riendo junto con él...

Temprano por la tarde:

Salio el sol, compré una Kola Inglesa helada para acompañar mi Picante a la Tacneña que alimenta parte de mi sangre de tierra heroica que heredé de mi . Preparé café, me senté encima de la barra de la cocina y en la PC sonaba algo de Camera Obscura. Un Rayo de luz da justo a mis ojos y se derrama el café sobré mis jeans.

  • Entonces me sentí con aroma a recuerdo, con un nudo en la garganta... Y yo cerré mi tarde con una sonrisa boba, tarareando I don't want to be part of your scene...

Temprano por la noche:

Cerré la puerta con 2 llaves, volví a salir corriendo con los pelos locos al viento, en el horizonte el cielo iba cambiando de color. Volví a sentarme al lado de la ventana, saque mi reproductor y dejé correr mi mejor playlist. Observaba con detalle la ciudad iluminada, taxistas, restaurantes, skaters, turistas. Mis ojos iban poniéndose vidriosos y nuevamente la sonrisa boba comenzaba a apoderarse de mi rostro. El soundtrack de la ciudad estaba mejor que nunca, veo a una pareja caminando de la mano y ella traía una rosa entre sus dedos, veo a unos chiquillos con tijeras persiguiendo a un loco puberto embargado de felicidad (seguro había ingresado a la universidad), sube un cómico y le baila marinera a un viejo cascarrabias.

  • No aguanto más, me suelto en risas y la acompañan unas lágrimas bobas producto de mis ojos especial y curiosamente vidriosos... Y yo cerré mi noche con una sensación liberadora, era como sentir inconscientemente una pena lejana que casi no identifico pero que me hacía sonreír...

De apegos y desapegos

No hay novedades sólo destapes... de todas formas ella es reincidente en apegos y desapegos; siempre se ha dicho que prefiere el trayecto de las cosas, sentarse al lado de la ventana, observar como todo muda a su redor, y así se siente segura de no saber lo que le espera y cuando le espera... pues sí, confiesa que sus frenos andan sin ajuste aún, tiene un miedo tonto al detenerse, le cuesta más la dramatización de la obra, la ejecución del proyecto que la misma creación de la novela.

Dice hola a algunos, dice chau a otros, encuentra su espacio en la cama para tener que abandonar, abraza, ríe y llora viendo un dvd de Roberto Carlos de pura emoción porque es una romántica asolapada.

Las acciones son tontas a veces, las palabras también pero el brillo es siempre sincero e ingenuo, no sabe mentir aunque lo intente; a pesar que tiene un lado que se siente gigante y valeroso cada vez que atraviesa coordenadas, acomoda el horario de su reloj y compra un ticket de metro, sabe que sigue siendo una niña... la de apegos y desapegos.
Está agudizando su sexto sentido, ese que le hablo de amores desganados y de prontos alivios; al parecer debería comenzar a entender mejor a la humanidad pero por el momento quiere seguir haciéndose la tonta porque en realidad no hay mucha vuelta que darle, ves que la última pieza que le dio su historia fue una Luna enormemente borrosa... para que decifrar más.