La ceguera de todos, es el cuadro de incivilización que veo colgado en medio de la civilización. Gente come gente, enfermedades que no piden tenerse, ríos de sangre que se mezclan en las fronteras, pueblos olvidados que se vuelven renegados, manos pequeñas que lucen ser de grandes, egoísmo, injusticia, intolerancia...

Mundo de usos y abusos; calles de la amargura a cada 5 metros. Se que siempre fue así, esto no es la América de Colón, pero es que el colapso emocional que actúa como efecto domino, al ver tantos cuadros de fondo rojo, choco justo aquí hoy.

No creo que el mensaje al final de tantos gritos desesperados sea: "sobrevivencia" en medio del caos, no hay que hacer un esfuerzo de más para vivir, yo soy floja no quiero sobrevivir, sólo vivir.

Hay tantos ojitos vivaces que se esfuerzan por no perder su luz aún estando en medio de la completa oscuridad ¿porque no podría esforzarme tal cual?
Es difícil luchar contra tu propia imagen, indirectamente me siento parte de lo que no quiero ser parte, aunque de lo contrario no podría ni siquiera comenzar a cuestionar. Ahora recuerdo ese sueño recurrente que solía tener cada vez que hervía en fiebre... iba montada en mi bicicleta dando vueltas al mundo desde la exósfera, un pacman gigante me perseguía destrozándolo todo a su paso, nunca tuve otra reacción más que escapar, sentía terror con sólo mirar el cuadro ROJO... será que llego el momento de hacerle frente al que se lo come todo, antes de que me coma a mi también?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Creo que el momento llegó hace ya bastante rato. El mundo está overload de injusticias y antes de que reviente como globo de carnaval que te cae en la cara, hay que hacer algo.

Un abrazo,

Lu
Mamá de DOS chancletas